rusos y polacos

parashka salió doblada a recibirnos.
Que alegria, dijo. Eufemio está llegando, agregó.
entramos y nos encontramos con una gran reunión familiar.
un viejo ruso que hace setentay tres años habia hecho la travesia de cuatro dias entre maitén y el hoyo con eufemio no paraba de contar cuentos de rusos y polacos, del hotel de los inmigrantes, de las desventuras de sus padres, de la llegada al hoyo de los kolb, los szudruk y otros.

eufemio atendia a las visitas. traia salamines, queso, pan casero. Probá éste dulce, Te voy a hacer competencia, decia y me atoraba con delicias hechas por el. Parashka estuvo mal, La tuvimos que operar, mechó entre la charla.
trajo unas copitas, sirvió primero un guindado, después una slivowitz, Ésta la hace el alemán de enfrente, Probá que buena está, y explicó como habia que tomarla, empezó a cantar en polaco golpeando la botella. entre el nazdrovia y el dovarich el slivowitz se acabó en un fondo blanco.

era imposible meter nuestro tema en esa fiesta familiar, seria una descortesia para con todos, hasta para con nosotros mismos.

la gente se empezó a ir. eufemio que nos hacia quedar, manejando la situación
al final preguntó, Y los políticos, ¿Que vienen a ofrecer?

Vinimos a comentarle eufemio que vamos de candidatos...
Si, ya se, salieron muy lindos en la foto del diario ese...

hablamos de todo, nos comentó que por su casa ya pasaron todos (debe ser por las delicias, pensé yo) ya que ninguno de ellos dos votan

Yo siempre fuí peronista, se autodefinió, pero creo que santuchito se merece ir de diputado,
Se lo merece por el, por todo lo que hizo por el pueblo y por lo que todavia puede hacer,
Ojalá gane mi pariente Teo, Ojalá ganen ustedes, nos deseó cerrando un domingo de gloria.